...Detrás de los cristales llueve y llueve...Y no deja de llover, el cielo llora y la tierra se inhunda; jamás había visto nada igual.
Siempre me han gustado los días de lluvia, pero cuando lleva lloviendo semanas sin parar y llevamos meses sin ver la luz del sol... cansa mucho, y entristece a todo el mundo. Sí, estoy triste y malhumorada como la tierra y el cielo, y no tengo ganas de nada (claro que, eso no sé si cambiaría con el sol)
El tiempo en el que no estoy pensando en muñecas, pienso que nunca antes se habían dado tantos terremotos, inhundaciones y catástrofes naturales en tan poco tiempo, al menos que yo recuerde, y creo que nos hemos dado cuenta demasiado tarde, porque ya hay poco que hacer...
Hoy he pasado el día en silencio, mirando las gotas de lluvia que se quedan en el cristal, y mirando el agua embarrada bajar mi calle, ya como una costumbre.
He estado de sofá en sofá y de cigarro en cigarro mirando las nubes negras que parecen una sola, muy grande y densa que no se quiere marchar jamás...
